- En un bol mediano se mezclan 125 g de harina, 6 g de levadura en polvo, un pellizco de sal y una cucharada sopera de cebollino fresco picado finamente.
- En un bol más pequeño se mezclan 30 g de queso tipo Philadelphia y 15 g de mantequilla hasta obtener una mezcla homogénea. Se añade 1 huevo y batir. Finalmente se añaden 185 g de leche y se vuelve a mover.
- Se vierte el bol pequeño en el grande y se mezcla hasta que no queden grumos (se puede usar la batidora, para lo cual es mejor reservar el cebollino e incorporarlo más tarde para que no se triture).
- Se pone una sartén antiadherente a fuego medio. Una vez coja temperatura, se unta ligeramente con mantequilla y se va echando masa a cucharadas con cuidado de separar las tortitas suficientemente unas de otras. Se cocina la primera cara durante aproximadamente 1 minuto (hasta que empiecen a aparecer pompas en la cara visible). Se le da la vuelta y se deja otro medio minuto hasta que se dore.
- Cuando se termina toda la masa, unta en cada tortita un poco de queso tipo Philadelphia o un poco de crema agria con una pizca de sal. Encima se coloca un trozo de salmón. Se decora con un poco más de cebollino picado. Se sirve a temperatura ambiente.
NOTA: Se puede hacer una versión aún más sencilla usando un preparado para tortitas para la base si andáis con prisas. Además se puede preparar hasta con una hora de antelación, aunque para mi gusto está mejor cuando aún está tibio.
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