Para completar la experiencia americana hicimos una mañana un típico y auténtico brunch americano a base de los típicos huevos revueltos con bacon seguidos de french toasts acompañadas de manzana caramelizada y regadas con maple syrup recién ordeñado del árbol. ¡Gracias por tanta hospitalidad! Tendré que volver para aprender la segunda parte: los huevos benedict con mimosa...
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- Se fríe bacon en una sartén en su propia grasa que se irá acumulando con cada tanda.
- Se baten unos huevos y se hace un revuelto en la misma sartén aprovechando la grasa sobrante del bacon y se sazona con un poco se romero.
- Se preparan unas manzanas caramelizadas. Para ello se cortan unas manzanas tipo fuji en trocitos pequeños. Se ponen en una sartén con mantequilla, canela y nuez moscada a fuego no muy fuerte hasta que estén blanditos.
- Mientras se hacen las manzanas, se preparan las french toasts. Para ello se empieza por cortar unas rebanadas de un pan esponjoso y se tuestan un poco en el tostador. Luego se dejan enfriar un poco en la nevera para que cuando se rebocen no se cuaje el huevo.
- Se prepara el rebozado mezclando 3 huevos, 3/4 cups (~183 g) de leche, 1 tbsp (~13 g) de azúcar, 1/4 tsp (~2 g) de sal, 1/2 tsp (~5 g) de extracto de vainilla, canela y nuez moscada al gusto. Esta cantidad es aproximadamente para 4 tostadas (aunque también depende del tamaño que tengan, claro).
- Se unta una plancha de mantequilla y se ponen las tostadas una vez que han estado empapándose suficiente tiempo. Se pueden espolvorear entonces con un poco más de canela/nuez moscada mientras se hacen a la plancha.
- Las tostadas se comen con la manzana encima. También se puede poner más mantequilla en ellas, echarle nata montada y/o sirope de arce.
- Se puede acompañar con algo más de fruta también; la piña le va muy bien.
Enjoy your brunch!
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